Hoy acuso formalmente al comisionado Mauricio Nelson, por su desempeño durante los años que tengo de conocerlo como miembro de la Policía Nacional. Baso este señalamiento en evidencias reales, testimonios de personas dentro y fuera de la institución y en mi experiencia personal de los últimos 4 años.
Yo acuso al comisionado Nelson de haber sido durante sus experiencia en el área metropolitana, un pilar de respaldo y apoyo directo e incondicional para sus subalternos en la institución, enfocado siempre en el contacto con la comunidad y el fortalecimiento del trabajo en conjunto con empresarios y vecinos de la capital.
A la vez, acuso al comisionado Nelson de haber respaldado incondicionalmente la labor de nuestra fundación y de muchas otras, así como de haber sido pieza fundamental en la organización del Concierto por la Paz 2009 y 2010, años durante los cuales fungió como encargado del Área Canalera, motivando no solo a sus compañeros de trabajo, sino también a los vecinos y jóvenes de la comunidad.
Finalmente, acuso al comisionado Nelson, de haber sobrepasado mis expectativas y según he podido percibir, las de la gran mayoría de los nativos, residentes y empresarios de la provincia de Colón, al ser designado a tan abandonada provincia. Nelson logró - por primera vez en mucho tiempo - disminuir la percepción de inseguridad y violencia que ha atormentado a estos hermanos durante tantos años.
De todo esto acuso yo al comisionado Nelson, confiado en que mis principales pruebas de estas acusaciones serán el testimonio de las personas que han compartido personal o profesionalmente con este señor durante el transcurso de su carrera en la Policía Nacional.
Lamentablemente, con todas las herramientas que nos facilitan la tecnología y los medios de comunicación, resulta fácil el poner en duda la reputación de una persona, muchas veces sin contar siquiera con las evidencias, el debido proceso, ni el derecho constitucional a la presunción de la inocencia.
Confieso haber tenido mis dudas acerca de si debía escribir sobre un tema tan delicado y sensitivo como este. No puedo poner mis manos en el fuego por el Comisionado Nelson, y es que creo que difícilmente uno se atrevería a ponerlas por alguien que no sea uno mismo. Lo que si puedo hacer es escribir esta nota y compartir con ustedes un punto de vista positivo y unas palabras de respaldo para un ser humano, un ciudadano y un profesional del cual muchos tenemos una muy buena opinión basada en hechos y acciones concretas, no en rumores o noticias que son "rating para hoy y olvido para mañana"
Si existe un delito y se cuenta con pruebas contundentes que lo incriminen a él o a cualquier otro miembro de la institución, que se tomen medidas ejemplares y que se castigue con todo el peso de la ley. Pero de no ser así y de resultar inocente de todo cuanto se le acusa, espero que tengamos la valentía y la decencia, para al menos tratar resarcir el daño ocasionado, sanar las heridas creadas en la institución y sobre todo, limpiar su nombre, honra y reputación con la misma intensidad con la que se ha señalado al comisionado Mauricio Nelson.
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